Las Sirenas

Las Sirenas eran ninfas del mar que tenían el poder de seducir a quienes las escuchaban.
Cuando Ulises, se aproximó a la isla cuyo mar estaba habitado por las sirenas, tapó los oídos de sus compañeros con cera y él mismo se ató al palo de su navío, hasta que estuvo lo suficientemente lejos de la costa para no oírse el canto de las Sirenas.
Se las representaba con cabeza y pechos de mujer y la parte inferior del cuerpo de pez.
Se decía de ellas que estaban en relación con las regiones infernales.
Su patrimonio eran los cantos armoniosos.
Hay mitolólogos que opinan que las Sirenas eran cortesanas o comediantes que en las playas sicilianas atraían a los pasajeros con sus encantos puestos de manifiesto con desnudeces, cantos y bailes.